Año 2008. Nueva York. Después de 17 de tertulias culturales en 8 meses y ya con mi pronto regreso a Barcelona decidimos hacer un homenaje a Estanislao Zuleta (Considerado el pensador más destacado del siglo XX en Colombia a través de una encuesta de la Revista Semana del año 2003). De esa idea surgieron dos proyectos: La edición de un Libro: ESTANISLAO ZULETA, aproximación a su pensamiento- An approach to his thinking. Fue la primera edición bilingüe de tres de sus más importantes artículos y las reseñas de toda su obra y el COLOQUIO: Homenaje a Estanislao Zuleta (1935-1990) con la participación de los conferencistas colombianos José Zuleta (poeta), Alberto Valencia (sociólogo-economista), Jaime Atencio (antropólogo) y Sandra Jaramillo (Fundación E.Z Medellín). Realizado con en las instalaciones del John Jay College of Criminal Justice.
No me acuerdo cómo me conseguí el número telefónico del poeta José Zuleta en Cali, el hijo de Estanislao, quien se había dedicado a editar y publicar gran parte de la obra de su papá que se encontraba en grabaciones de cassettes hechas por alumnos y profesores durante charlas que el pensador daba en universidades y diferentes instituciones, ya que ese fue su instrumento de transmisión del conocimiento, la conversación, tal como dice William Ospina en un lindo artículo “Zuleta hizo de la conversación un arte admirable” . Le dije a Pepe que desde que un profesor de arquitectura me enseñó la obra de su papá no había parado de leerla, le conté como en “Educación y democracia” me encantó la idea traída de Platón de que la ignorancia no es un estado de carencia sino de llenura o indigestión, o de la importancia que él daba al arte y a los artistas como en la antigua Grecia o en La Ilustración donde eran considerados necesarios, eran “estimados”. Enseguida le hablé de nuestro grupo cultural y de que nos encantaría hacerle un homenaje a Estanislao en Nueva York. Pepe de una dijo que sí. Yo no sé si lo dijo por decir, por ver qué pasaba, porque se entusiasmó o las tres cosas, lo cierto es que al poco tiempo nos contactó con todas las personas necesarias para hacer un evento con un alto nivel académico y debo decir que así fue.
La edición del libro y montar ese Coloquio fue algo muy complicado, con mucho desgaste en lo personal y también dentro del grupo, que ya estaba medio cansado de mis ideas como ellos llamaban “quijotescas” y que surgían de mis propios intereses académicos personales. Pese a estos impases, el libro se editó y el coloquio fue un éxito total, tuvimos además dentro del coloquio y como cierre la presentación de los artistas colombianos Edmar Castañeda y Andrea Tierra como no podría ser de otra manera.
Gracias a todo el equipo de MOMENTOSde… por meterle ganas a este último proyecto que fue considerado demasiado ambicioso por la complejidad que tenía que un grupo de amigos sin plata, llevara conferencistas de Colombia a New York, encontrara una institución que estuviera interesada en acogernos y editara un libro con la rigurosidad necesaria del personaje. Luz Ortiz como siempre trabajó hombro a hombro conmigo en la producción general. El poeta José J. Ortiz se encargó de la maquetación y diagramación digital del libro. La portada fue de Dan Cuenca. Las traducciones de Leonard Morin, Rosene Zaros y Steven Stewart.
Sobre todo, quiero agradecer la generosidad que tuvo José Zuleta para facilitarnos material personal y escribir exclusivamente para el Coloquio el hermoso texto Una deuda de amor y a Alberto Valencia por su asesoría en la escogencia de los textos y recopilación de reseñas, algunas escritas por él.
Cerré una etapa muy bonita de mi vida después de 10 meses intensos en Nueva York donde desperté esa pasión que tenía guardada por la cultura y las ganas que tenía de producir eventos que promovieran el arte, así que regresé a mi Barcelona de nuevo con la ilusión de nuevos proyectos.